EL OSO

No pienses en un oso rosa. Te resulta difícil, ¿verdad? Es muy posible que en este momento la imagen de un oso rosa aparezca en tu cabeza una y otra vez. Cuanto más te propongas no pensar en ello, más se inundará tu mente de ese pensamiento que intentas evitar. Te dicen que todo pasa, que respire. No dejas de verlo, de sentir que te persigue, es un oso, grande y rosa. Las manos te sudan, la respiración se acelera y solo quieres huir, escapar, desaparecer. Te dicen que no es para siempre, que el oso un día desaparecerá. Me dicen que todo pasa, que respire. No dejo de verlo, de sentir que me persigue, es un oso, grande y rosa. Las manos me sudan, la respiración se acelera y yo solo quiero huir, escapar, desaparecer. Me dicen que no es para siempre, que el oso un día desaparecerá, yo creo que si lo es, solo tengo que aprender que me acompaña, solo tengo que mantenerlo a raya.